Despertamos lentos,
como negandose a aceptar.
Tener que levantarse..
Retrasando relojes injustos.
Vuela la mente en excusas
que sabemos tontas,
pero estan...
Entonces nos usamos
poniendonos en el lugar
de cuidar ese compromiso.
Ahondando esa tibia sensacion
de encontrar un complice
y no un responsable ceñudo.
Humedecemos los labios
y endulzamos la sonrisa.
Buscamos la seduccion..
Todo inutil... sabiendo lo inevitable,
Debemos levantarnos.