En mi ventana veo caer lágrimas cerca mí,
En noches frías y sin estrellas
La depresión en otro cielo procrea mi vida.
En el vientre viviente y algo triste,
Ahí en la placenta de un cordón umbilical de melancolía
Me alimento con mucho sufrimiento…
Y me cobija las cicatrices del dolor.
Soy frágil tanto como el pétalo de cualquier rosa,
Y aun así… no se como describir el color de mi tumba
Aun así no se como proyectar mi rostro al pezón de mi madre,
No se como extraer y beber el majar ella posee darme.
Lactar ese ánimo bajo,
Y recorrer calles oscuras, en tiempos olvidados
Alimentarme del dolor ajeno y hacerlo mío en silencio,
Vivir mi experiencia de nacer en la espalda del mar
Y llorar cada lágrima viva… de la depresión continua.
La verde llovizna pide a gritos tristeza
Los astros muestran más que una simple melancolía,
Algo alcoholizados, se muestran mis sentidos…
Algo deprimidas están mis manos,
Algo peculiar y muy heredado me dejo mi Madre la Depresión,
Vivir triste en desolación.