"Que un sexagenario se ha perdido"...
"Que rescataron a un sexagenario"...
Infame costumbre de los diarios
el quitar la condición de ser humano
a aquel que osare tomarse de la mano
del marginado número sesenta,
no consentiré impávido a esta afrenta,
pues amo, siento y sueño como antaño,
al celebrar mi cercano cumpleaños,
con fuerza desearé ser invisible
y al hacerlo quizás fuese posible
que este mundo cayese en el engaño
y no perciba que ha perdido a un ser
humano
y que ha ganado a un sexagenario!