Puede ser que un día me vaya sin despedirme,
En quizás el mas largo de los días de otoño,
Con el corazón en la mano, sin haber podido entregártelo
Puede ser que un día me aplaste la soledad de la tarde
Que el verano pase sigiloso sin verlo, sin sentirlo;
Que la primavera sea solo una imagen lejana
Puede ser que de mis ojos no broten sino lagrimas frías
Ansiosas de tus ojos, que queden para siempre dormidas
Esperando para siempre recoger tus anhelos locos
Puede ser, que mis ojos algún día, no vean sino hojas secas
En lugar de rosas, en lugar del brillo de tus ojos,
Desmayadas en el suelo, husmeando su pena
Puede ser, que el arcoiris se matice no de verde,
Sino de grises y oscuros y desconocidos colores
Y al final solo encuentre un recipiente vacío de caricias.
Puede ser, que un día dejen de trepidar los tambores
Que me mueven hacia ti, que hacen vibrar
Cada fibra de mi ser, que me hacen enamorar
Le cuesta a mi alma levantarse, sin dejar de evocarte
Sin dejar de llamarte, pero no te escucha,
Y termina desvanecida, de rodillas, despidiendo la luna.
Jordi