Carta a un nieto
Querido nieto hoy me has dejado pensando
Cuando me pides un consejo
Para enfrentar la Vida...
Es curioso la misma pregunta hice yo;
Pero no a mi abuelo, ya que él;
Siendo mi amigo, ya se había ido;
Pero la hice a mi madre.
Ella era una mujer con mucha fuerza y;
Luchadora de la ¡Vida!
Hijo la vida es como el azar
Nadie se retira de este mundo
Con sus ganancias.
Tú debes comer para vivir y;
De las flores y la naturaleza alimentar;
Tu alma.
La vida es corta en la tierra
Vivir en ella es caro
Pero las fantasías del ¡Sol! y la ¡Luna!
Te llevarán a salir adelante.
El oficio de vivir es tan difícil
Que cuando uno lo aprende, ya;
Está pronto a la muerte.
Lo que sí te puedo aconsejar, es;
El trabajo, el aprendizaje, la honestidad,
La sinceridad y el ¡Amor!
Son las herramientas que debes usar
En este pasar por esta vida.
Tú serás tu propia leyenda
No importa que sea larga, sino;
Que esté bien narrada.
Los hombres están hechos de un mismo barro,
Pero “NO” de un mismo molde.
Te aconsejo que hoy como joven subas a la montaña;
Y medita tranquilo en la soledad
Ahí encontraras las respuestas, para bajar de ella
Con la sabiduría de un viejo
Y el hambre de un joven.
Ahí te darás cuenta que la vida es;
Un azar
Si tú no sabes jugar en la vida
Con las cartas correctas será;
Un mal juego.
Hoy me viene a la memoria
Que el día que naciste todos reían;
Mientras tú llorabas;
Ahora vive tranquilo para cuando mueras,
Todos lloren y tú rías
Entrando al paraíso de ¡Dios!
Querido nieto...hoy sólo te:
Traspaso las palabras de mí;
¡Madre! Que a mi me han servido, en;
La ¡Vida!
Autor: Hernán R. Cornejo Véliz