Al ardor que llama en mi pecho
al mayor de los despechos,
al más friboló de los acontecimientos
yo le doy la importancia de tus senos.
No comprendo porque tu no comprendes,
no entiendo el momento del distanciamiento,
por qué me dejas plantado tan solo como cerrado
No quiero arrimar hombro a la espina que me duele
no quiero temblar ante el miedo que me embuelve,
solo apaciguar la llama carontiana que emprende
más de un sentimiento atroz, más de un sentimiento....
El enredo del sentimiento apaciguador no encuentra
un desolador final que lo respalde.
Más bien anota la duda nueva que amargue
con su sintonía la emoción de desgaste,
Al revés que cualquier conepto
no entiendo de rzonamientos
solo expreso mis sentimiento
a la par que emito cuestionas, dudas, amores..
no llego a comprender la mayoría de mis dudas,
no llego a entender,
la mayoría de mis ternuras
Así veo en cada realidad aquello formal
aquello material, abstracto y trascendental
que la mayoría de personas no captan
no consiguen arrimar la llama carontiana.
No consiguen afirmar la más solida verdad