GITANA DULCE

LA HORMIGA VIAJERA. – Cuento infantil.

En el mundo feliz de nunca llorar, había una hormiguita, que cansada de tanto y tanto trabajar… por que era las más joven de la comunidad… entonces le hacían trabajar y trabajar… Ella se había cansado y decidió irse a otro sitio… Se preparó sus cosas y marchó… Que puede llevar sobre sus hombros una dulce hormiguita… Cargó sus ilusiones… sus alegrías… sus tristezas… sus amores… y salió despacito sin ser escuchada...

Andando y andando encontró un perrito inquieto que miraba a su dueño quien cerrando la puerta se disponía a salir de su casa con bolsos, cañas… es señal que se van a pasear… La hormiguita presurosa se subió al lomo de ese peludo animalito… y se quedó muy quietecita mientras el amigo nuevo la llevaba a pasear…

Caminaron y caminaron hasta llegar a la ribera… y en cierto lugar el Señor se detuvo y comenzó a prepara sus cosas… primero estiró el mantel y colocó encima la canasta, preparó el termo, y el equipo de mate… Luego se fue hacia un costado y comenzó  a prepara las líneas… armó las cañas… y fue a la orilla del agua a tirar las líneas… mientras su mascota lo observaba atentamente… Como diciendo bueno… aquí estoy vigilante…

Comenzó a ir y venir de una caña a otra observando el movimiento… Y como toda esta actividad la cansó… decidió bajarse y mirando hacia el pescador… mmm… creo que también el tiene hambre… Está preparando el mate… y saco de su cesta… pancitos saborizados…  y comenzó a darse el banquete… Le tiro un trozito de pan al perro… y algunas migas caían sobre el mantel… mmm… que hambre le había dado… aprovechará lo que desperdicia el Señor…

Luego de comer opíparamente las migajas del pan desperdiciado… la hormiga se dijo que debía continuar su viaje pues por lo que observaba esto se demoraría por horas… La joven viajera… continuó su viaje… hacia la aventura…

Caminó y caminó… hasta llegar a una gran plantación de malva… bueno a ella le pareció tan grande ya que es muy  pequeñita… y se acomodo debajo de una gran hoja a descansar… a dormir su siesta…

Cuando despertó… decidió continuar su viaje… pues la inquieta hormiguita viajera debía continuar en este viaje que había emprendido… hacia los desconocido… hacia el nuevo día… hacia la aventura…