La hipocresía es una palabra que siempre nos resulta detestable,
es una palabra que encierra mucho dolor para quien recibe tal sentimiento
los hipócritas, jamás te dicen las cosas de frente
incluso cuando están contigo aseguran quererte
generalmente son personas muy amargadas, con mucho resentimiento
jamás soportaran que seas mejor en algo
y como casi siempre son carismáticas, pueden dar la imagen de amables
hablan siempre a tu espalda, envenenando a tu círculo de amigos
por que lo mejor que les salen es la manipulación
un hipócrita jamás dirá que se ha equivocado, afirmaras que fuiste vos
siempre tratara de hacerte daño, por que su corazón esta lleno de envidia y rencor
hipócrita es quien dijo hasta el cansancio amarte y en la primera tormenta desaparece
los hipócritas, no tiene corazón tratan de buscarte defectos para tapar lo propios
Jamás una persona hipócrita será una persona tranquila
viven y mueren pensando como dañar a quienes le rodean
la persona hipócrita siempre te esta recordando lo buena que es
por que les encanta alabarse y adoran que la adulen
disimulan querer, a quienes tienen en ese momento
olvidándose de las barbaridades, que han dicho de esas personas
justamente por eso por ser tan hipócritas,
se presentan como santos, pero si les descubrís una mentira
siempre tienen una excusa o historia para explicarlo
suelen meter mucho ruido, hacen algo enorme de cualquier cosita
necesitan hablar mucho, constantemente hablando mal de otros…
La hipocresía es la puerta por donde se introduce en nuestra sangre el virus…
FALSEDAD, DESLEALTAD, EGOISMO, MENTIRA, MENTIRA, MENTIRA…
Y cierra el riego al corazón produciendo en el cuerpo el anticuerpo contra el,
AMOR, LA SINCERIDAD, LA HONESTIDAD Y LA VERDADERA AMISTAD…
La vida me ha enseñado, que no debo engañarme a mi misma
que siempre debo seguir siendo la persona más sincera
cuidarme de las falsas lágrimas, esas que salen tan fáciles
ya que solo así podré sobrevivir en este mundo donde hay tanta gente hipócrita
¡¡¡LA HIPOCRESÍA ES EL COLMO DE TODAS LAS MALDADES!!!
MARTHA MARIA GIGNOLI
JUNIO DEL 2011