Camina entre rosas grises que le han dejado
Cada vez que encaja sus colmillos
No lo recuerda, ya no quiere estar más condenado
Su desvelo ya no le causa preocupación
Se entretiene al ver lo que a su parecer abandono
Para saciar su sed, que nadie podía comprender
Aunque aquellos pensamientos tan humanos lo
Atormentan, sabe que no le pertenecen más
Que a aquellos que bajo su mano han caído y han
Visto su oscuro ser.
Bajo la luna se esconde, ya que como el
Ha quedado tan fría, con la luz de una estrella
Su victima se aferra a sus hombros para poder ver
Aquellos ojos que ni en sus pesadillas pudo comprender.
Aunque solo una vez, quisiera probar de su ser.
Aunque vea su alma condenada merodear con esmero
Mi ventana. Sé que mis lágrimas no lo harán regresar.
Que mis pasos junto a los suyos ya no estarán.
Aunque el es eterno, su olvido no lo será.
Yo se que siempre me amara.
Aunque mis brazos siempre caigan con torpeza hacia el,
Se esfumara
Nunca me hará daño, aunque sus labios sean como
Pétalos suaves para mí.
Sus manos frías se deslizan, pero se apartan y como un viento
Solo me dejan el recuerdo
Si una vez mas volviera a soñar, el esteraría ahí
Siempre esperando por mí.
Una vez más se va, buscando un condenado que lo sepa saciar
Pero el no entiende que estoy aquí condenada a sufrir
Por no poder ser la que sacie su sed.
Déjame amarte una vez, y te prometo que no te abandonare
Jamás