Llegaste. Como viento nuevo...
Como agua fresca en el desierto...
Llegaste a encender las cenizas de mi fuego
A darle el soplo que necesitaba
¿Por qué negarlo?
Si el mar es salado
La nieve es del invierno
El cielo nublado presagia lluvia
El rio acrecienta cuando el agua baja por la ladera
Sin que nada le impida llegar a él
Así llegaste a mí...
Como viento, como agua...
A darle vida a lo que parecía muerto
Sonrisa a la tristeza
Alma a mi cuerpo
Luna a mi cielo