Algún poema hablará de la alegría que le has traído a mi vida,
dará razón de la novedad que me llega con tu voz apacible
y del aliento que le has empapado a mi existencia.
Algún verso, qué sé yo, logrará contener la palabra precisa
Que hable del amor, amor, amor.
Alguna de estas noches, alguna de mis risas,
o algún susurro, qué sé yo.
Alguna caricia,
alguna hora de las que generosamente ocupas en mí,
en escuchar mi insistente afirmación,
logrará convencerte de lo que has logrado en mí.
Enamorarme. Ese es tu logro mujer bendita.
Hacerme creer en el amor total,
sincero y con una sola condición;
que me ames tanto como yo te estoy amando.
Justo ahora amor, amor, amor.