Que no me darías, si me amaras,
que no ofrecerías, si me adoraras,
si fuera tu mundo, y también tu agua,
si por las mañanas, a mi me abrasaras.
Y si me besaras, constantemente,
y si me comieras tan solo al verme,
que no me darías, pregunto yo,
si yo fuera, tu dulce ladrón.
Y su tu pecho, me lo robara,
que me darías, por esa causa,
que me ofrecerías, que yo aceptara,
solo quiero un beso, de ti mañana.
Y si fuera yo, a quien tú amaras,
que me darías, que no aceptara,
solo quiero un beso, de mi amada,
aunque ella no quiera, de mi ni las gracias.