FELINA

CUANDO UN CARIÑO SE MUERE

¡Ay amor! por qué te quiero

si tú dices no quererme...

allá donde está el duero

hay un corazón inerme

que tallamos hace tiempo,

¡cuándo decías quererme!

 

¿Qué pasó con el cariño

que decías tú tenerme?

Se fue como agua de río

llevándose los sueños,

golpeando los sentimientos

 en las piedras del camino.

 

¡Ay amor! me has condenado

a vivir en soledad,

todo el tiempo te he extrañado,

sin saber en realidad

por qué me dejaste de amar...

¿Acaso cuál fue el pecado?

 

Por qué feneció el cariño...

y el amor que decías tenerme

ha dejado de existir,

envolviendo mi piel de armiño

con las sombras de lo inerte,

vistiendo de luto mi alma,

despojándome la calma.

 

En lúgubre campo santo,

tengo que enterrarlo,

cuando un cariño se muere

sólo queda sepultarlo...

cuando un cariño se muere

sólo queda recordarlo.

 

No te guardaré rencor,

en mi ser, sólo hay amor,

sangraría más la herida

enturbiando el corazón

y,no veo la razón

para mi perfidia.

 

Tengo un espíritu pulcro

en donde no hay mezquindades,

llevaré flores al sepulcro...

en donde no hay vanidades

y sigue tú en este mundo...

 

¡viviendo, de frivolidades!

Felina