Jhon Deivy Torres Vidal

BREVEDAD DEL ENSUEÑO

Te maduran los ojos.

El amor te deslumbra.

Te desvela la idea

    de sentirte deseada.

Te maduran los labios.

La pasión te seduce

y tú caes rendida

a su fuerza y engaño.

 

Te maduran los ojos.

Es tu risa un pañuelo

que saluda al ensueño.

El deseo florece!

  Tú deseas y amas.

Lo demás ya no importa.

Ya no importa más nada!

 

Sigue así hasta otoño,

que el amor también duele,

cuando tus labios sean

un pañuelo con lágrimas.

Sigue así hasta invierno

cuando el frío te invada.

Cuando más que tus ojos

ya madure tu alma.