Como un ciego en sus caminares, nos perdimos en la oscuridad de la noche sin saber del uno al otro y nos dejamos ir por nuestros instintos y por aquella pasión espontánea que nació de nuestros corazones. Muchos minutos pasaron, muchas horas pasaron cuando en la quietud solo se oían el palpitar acelerado de nuestros corazones y los suspiros profundos que hacían elevar nuestros pechos rompiendo la tranquilidad de la noche. El tiempo paso tan rápidamente que no supimos ni decirnos adiós, solo quedo en nuestro pensamiento la idea vaga de quien eras tú y quién era yo. Solo nuestro instinto podría volver a reconocer ese amor que salió de la nada y se perdió en la nada, esa fuerza que nos hizo perder la noción del tiempo y que hizo estremecer nuestro ser. Muchas veces he vuelto a recorrer aquel lugar donde paso aquel bello momento y mi búsqueda ha sido en vano solo se escucha el ruido de las brisas marinas y el estallido de las olas y a mi mente llega solamente el recuerdo de aquella noche nada más.
De La Letra Y El Pensamiento Unicos Del Autor®
Omar Ventura