Antes de ti, que oscuro era el cielo,
que espeso era el aire,
que difícil era ver,
tan imposible respirar.
Antes de ti, no había vida,
muda era la inspiración,
antes de ti en mi pecho
no latía el corazón.
Antes de ti los sueños,
no existían en mi alma,
no hallaba consuelo
ni tampoco había esperanza.
Antes de ti mis manos,
no escuchaban mis lamentos,
y no los gritaban al cielo
a tus ojos, hechos versos.
Antes de ti mi boca,
no dijo jamás "¡te quiero!"
con la fuerza y sentimiento
con que ahora lo está haciendo.
Antes de ti mi vida,
era bosque en el invierno,
era placer tan doloroso
era el cielo en el infierno.
Antes de ti las noches,
sólo eran para dormir
hoy entre el alcohol y versos
son buen lecho para morir.
Antes de ti mis ojos,
por nadie más habían brillado,
ni al pronunciar tu lindo nombre
tanto habían jamás llorado.
Antes de ti la sangre,
no corría por mis venas,
envenenada por lo dulce
y lo amargo de mis penas.
Antes de ti mi alma,
no sufría ningún dolor,
pues antes de ti cariño
yo no conocía el amor.