! Oh Dios ¡ omnipotente, señor
con tu voluntad divina,
me regresaste el amor
de mi mujer amada.
Admiro, oh señor, tu voluntad
soberano del universo,
me das la felicidad
y mi amor en ti refuerzo.
Hiciste que volviera a mí
con su sonrisa encantadora,
y siempres estarás en mí
con mi mujer, mi señora.
Señor ! oh mi Dios ¡
de sabiduría sagrada,
me diste otra vez el amor
de la mujer amada.
Por: Manuel Palacios.