Por qué no hablar de ti
Por qué no hablar de ti
cuando no tengo ideas
y no me alberga otra pasión.
Por qué no hablar de ti
cuando los astros celestes
se encaprichan en tus ojos.
Por qué no hablar de ti
cuando los cimientos de las ciudades
retumban con los ecos de tu nombre.
Por qué no hablar de ti
si los perros aúllan
tétricos lamentos acompañantes.
Por qué no hablar de ti
a la soledad de una casa vetusta.
Por qué no hablar de ti
a las más cercanas sombras.