Me da tristeza mi México,
supongo que quiero pensar que estoy en una pesadilla.
El México antiguo estaba partido en varios,
ahora ya está partido en muchos:
en muchos pensamientos,
en muchos intereses
en muchas clases
y todas y cada una con sus pestes.
Mi México como te quiero, por que te quiero tanto
quisiera no quererte para no estar sufriendo por tí
se siente una aprsionamiento en el pecho
por los que vivímos aquí, y hablo por los del Norte de mi país
como menos por los que han sufrido de tener constante zozobra y
por los que ya no han podido disfurtar de la noche y su obra;
como más por aquellos que no solo tienen esa presión en el pecho
si no que fueron desterrados por el miedo de vivir en su lecho,
los que perdieron gente de su familia como deshecho.
Mi preocupación y mi empatía ante eso suena como un juego de niños;
ya no más sangre dicen algunos; otros dicen
ésta "guerra" en México es por inmponer el estado de Derecho;
pero lo que nadie puede negar y si es un hecho
es que hoy miles de ciudadanos estamos enclaustrados
en lo que alguna vez fue un México en el que se gestó
lo que ahora explotó,.
¿Quién puso la mecha?,
¿Quién prendió la dinamita?,
o ¿Quién hizo la bomba?
son cuestiones que ahora no importan,
lo que importa es que recogamos esos pedazos de México
y armemos de nuevo el rompecabezas, dejarnos de prejuicios
y olvidarnos de que existen partidos,
por que no hay mal que dure cien años
ni cuerpos o países que lo aguanten.
y ¿cómo terminará todo esto?,
Respuesta: Cuando quede la última gota de paciencia y ni los mismos mexicanos
sabemos NI COMO NI CUANDO.