¿Bailamos? Dame un trago y ¡Vamos!,
El dulce ritmo sabrosón está sonando ya,
El cosquilleo inquieta y no deja frenar.
No te sueles animar pero haz un esfuerzo,
Ven conmigo a degustar, brincar, sudar y disfrutar.
Es muy sencillo, únicamente es necesario dejarse llevar
Y ese concierto, precisamente, no se te da mal.
(Guiño pícaro y provocador, ¡Jajajajajajaja!)
Con tus manos en mis caderas, la música se apodera,
Hipnotiza, aprisiona y un mundo de candencia se libera.
Sin ninguna posibilidad mi cuerpo responde sólo al compás.
Haz lo mismo y bailemos al ritmo de la pleamar.
Una ola se aproxima, nuestros cuerpos se reavivan
Se entrelazan, se funden con ademán consustancial.
Siente mi mirada, no dejes de observar mis movimientos,
Gestos, susurros y mi incitadora seducción a continuar.
¿Sientes el siguiente paso que hay que dar?, ¡Qué más da!,
Goza del zarandeo que nos aleja en el mar,
Pequeña barca que no ha de regresar.
MARTA DORESTE