MELANCOLIA
¡Bendita primavera,
mezcla de emociones, aurora en mi vida
me das la bienvenida
dulce, cariñosa y placentera!
Alba de la vida
de luz esplendorosa.
¡Qué experiencia tan hermosa
la esperanza nacida!
¡Oh primavera florida!
Cuantas aves, cuanta flor,
cuanto divino rumor
inquieta la apacible calma
cuando despierta del alma
al primer beso de amor.
En mi inspiración,
entrego mi corazón
celestial elixir
para hacerme querer y sentir,
y en un gran anhelar
lucho por penetrar,
la cortina del porvenir.
¡Ay claridad!
brillo santo y fecundo
derrama sobre el mundo
fe, esperanza y caridad;
dadnos paz y felicidad.
Obscuridad interna, uno mismo;
duda que a veces infunde temor
en el pecho, el dolor
y en la testa, el abismo.
Cáncer del escepticismo,
no destroces más
conciencias en que estas.
En el mundo, el hombre, errante,
carga el ataúd delante
y la negra noche atrás.
¿Qué es esta oscuridad que no nos deja avanzar?
¿Por qué olvidar
alegrías y dichas que uno se finge?
¿Por qué nuestra fe restringe
y crece nuestra ansiedad?
y ¿Por qué en tan corta edad
inmensa lucha, duda fiera?...
¡Oh primavera, primavera!
tú nunca dices la verdad…
…Yo supe del dolor desde mi infancia
de mi juventud aun queda la fragancia,
saludando al sol que muere cada día
y en la fragancia de mi juventud, inmensa melancolía.
EDGARD OROZCO
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