Me siento estático como un pato
frente al pelotón de fusilamiento.
Afuera la noche de los días sin luz
hace que la lluvia pernocte
entre tus senos.
¿Dónde se esconden los hijos
del argumento gaseoso
cuando mi arma de estrofas
deja de ser libre
como el suspiro mañanero?
Me siento como un difunto
ávido de vida rejuvenecida a causa
de la dócil rebelión civil.