- I -
Del brazo del poeta iba tu vida,
subiendo candorosa al escenario,
a la mía, cual un escapulario,
llegando, te quedaste ya prendida.
Venías con tu musa y te quedaste
y a mi vida sentido pleno diste;
nostalgia, en alegría convertiste;
deseo, en esperanza transformaste.
Cual torrente de dicha, tu me henchiste,
riachuelo de dulzura prolongada,
pues completa en mi vida te vertiste.
Que aún estando de mi siempre alejada,
tu vida para siempre me ofreciste,
esperando a cambio... casi nada !
- II -
¿ Quién logró con vil embrujo, - convertir lo que era amor
en tosco y vulgar tapujo ?
¿ Quien dijo que era imposible, - querernos en la distancia
de forma tan ostensible ?
¿ Quién devolverá el candor, - que en ti todo era dulzura
y en mi era todo amor ?
¿ Quién devolverá aquel cielo, - que se me ha desvanecido
en tu corazón de hielo ?
¿ Quién devolverá mi vida, - que se quedó ahí contigo
y que la siento perdida ?
¿ Quién acallará mi grito, - que desbocado te clama:
“¡ Vuelve, que te necesito !”\'
¿ Quién trocó en soledad, - lo que era compañía,
cariño, gozo y bondad ?
¿ Quién mitigará el lamento, - que tristemente en la noche
brota de nuestro silencio ?
En este destierro frío, - hay silencio... hay soledad...
¡ Ayúdame Tu, Dios mío... !
- III -
Mis luces ya oscurecieron - y mis ojos ya secaron.
Las cosas que nos unían, - en la nada se quedaron.
Mi vida yace baldía; - vacias están mis manos;
se queda mi historia fría - y mis sentimientos... vanos.
Contemplo el mar, ya no estás; - miro al cielo, no te veo.
¿ A quién tu, ahora, amarás ? - ¡ Morir, morir... ya deseo... !
Para matar tu recuerdo, - voy en busca de otro amor.
Lo busco, mas no lo encuentro. - ¡ Ayúdame TÚ, Señor !
Tristeza atroz en el viento...! - ¿ Hasta cuándo te amaré ?
Sin tí todo es sufrimiento... ! - ¡ Me siento desfallecer... !
¡No quiero vivir, Señor; - a ti confío la vida!
Porque vivir sin amor... - ¡ Qué triste vida perdida !
- IV -
Circunstancias adversas, se aliaron;
errores, que a mis actos indujeron;
razones, que tu amor oscurecieron;
diablos, que el orgullo lastimaron.
Distancia, que pasaba su factura,
juventud, carente de respuesta;
conjuraron, dejando en vía muerta
el amor, la vida y la cordura.
Fue así como tristes se quedaron,
esperanza y amor en nuestras vidas,
que ya nunca su fe recuperaron.
Ilusiones soñadas y perdidas,
en fallidas ilusiones se tornaron,
... y en la nada quedáronse fundidas.
- V -
Reiniciamos las vidas separados,
entregados a quienes nos buscaban;
siendo tan candorosos nos ansiaban,
por vínculos nos vimos maniatados.
Largas noches, de entregas violadas;
mancillas, por las normas permitidas;
obligado mandato en nuestras vidas;
inocencias, de débitos manchadas;
Necedades; vacío en compañía
de dolores del alma, atormentada,
ocultos en deberes de agonía.
Vida y logros; trabajos, todo y nada;
deber y entrega, todo en demasía,
soledad por los triunfos disfrazada.
- VI -
Y en un punto de aquella lejanía,
nos dimos una cita ilusionados;
buscábamos amor, desesperados,
¡ para el alma, que amar aún ansía.!
Nuestras caras, están avejentadas;
nuestras almas, reflejan sufrimientos;
por familias, deberes, cumplimientos;
¡ por la gente que paga con la nada.!
Pobres vidas, que un día así nos vimos,
compartiendo los dos la misma palma:
¡ la entrega de uno al otro nos perdimos !
Resignación, serenidad y calma,
otoño de la vida hoy te pedimos...:
¡¡ la comunión total de cuerpo y alma !!
- VII -
Regresando en recuerdos de añoranza,
buscando luz la vida de mis ojos;
no hay antojos, caprichos, no hay enojos,
sólo unviaje, camino de esperanza.
Y llegó; ante todo con candor;
soslayó discusiones con dulzura,
a todo se enfrentó con su cordura,
no hubo enredo, tan sólo hubo amor.
Viajando así conmigo, se apeó;
y no se en qué estación ni en qué vía,
al marchar mi esperanza se llevó.
Es mi caso, cumplido ya está el día.
En mi vida, ya todo sucedió.
Ese era mi último tranvía.
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