Raimundo Ramirez

Un claro en el recuerdo

Doy un paso de gigante,

en este mundo que piso sin tu cara,

soy como un animal,

con el instinto de nadar en este barro.

Refugio en el hostal, 

donde quedan las huellas de tu paso,

las luces de aquel bar,

deslucen la fragancia del fracaso.

Miro, en los brazos de aquel que no tienen nada,

como en el canalillo de tu espalda,

donde no para el tren,

esa era mi parada,

los ojos que no ven,

el corazon siente el fuego en tu mirada.

No crece ya la hierba ante tus pasos,

me acordé de mi,

dejé de plantar, de regar,

de perfilar la comisura de tus labios.

Llanura en la que estas,

sin hueco para el eco de mis palabras,

sin poder decirte nada mas,

que te quiero dar mis alas,

que plantes libertad,

y que olvides donde estabas.