Queenmaster

Oscuridad, mi hogar

En esas frías noches sin abrigo

por la oscuridad me dejo seducir,

acariciando lágrimas de olvido

permito a esas sombras existir.

 

Fantasmas de lo perdido

les ruego  me dejen vivir,

¿No es suficiente haber sentido

que así ya no puedo seguir?

 

Sombras alimentadas por reflejos

de un pasado que no se aleja

crean una realidad de espejos

que a mi esperanza ya no reflejan.

 

Es el silencio el que me acecha

y por las noches a mi alma aterra

con sueños de una vida desecha,

llenos de sentimientos sin tierra.

 

 Y cuando la noche termina

la oscuridad ya es mi hogar,

confortable mentira de vida

por la que no volveré a comenzar.