Tu Incesante
Es tu incesante comparecencia fantasmal,
la que sin aviso me lacera el alma,
déjame sin más marcharme de este cielo
embebido en las pasiones que algún día
entre los sueños y recuerdos elevamos,
inmersos en la entidad misma de la alegría.
Un beso mudo vive aun en tu torso desabrigado
Las melodías sin proporción,
Los latidos mesurados del corazón;
me acorralan a cada paso del camino,
aun veo al tiempo aproximarse sin quererlo yo.
Los campos minados de mi sustancia
aun aúllan serenos a la luna
sin reconocer redención alguna.
Es tu incesante comparecencia fantasmal,
la que una vez más tantea la opción de dejarme sin juicio
al intentar recapitular el porque aun amo atreves de sueños
tan difíciles de atenuar, tan difíciles de matar.