Estrellas chispeantes de colores prohibidos,
deja que te atrape con este suspiro,
que te llegue al alma en este soplido,
y que te lleve a la prisión del corazón herido…
Que tu sexto sentido sea yo,
para guiarte en el umbral de la vida
y seducirte luciérnaga en el murmullo,
y liberarte en mi pecho que tienes cabida…
Porque quiero ser tus manos tibias,
tus ojos, reflejos de diamantes,
lagrimas, que rozan tus mejillas
beso robado por el amante…
Que tus oídos; escuchen la palabra callada,
que calcine mis pensamientos, tu pasión ardiente
que tu boca entone la poesía en una balada,
y sientas el aroma del amor valiente…
Que poseas a mi cuerpo agonizante,
en tus manos blancas y calidas como el cirio
alumbrando el despertar farsante,
del delicado y majestuoso lirio…