(Homenaje a Mario Benedetti)
“Si te quiero es porque sos
mi amor, mi cómplice y todo
y en la calle codo a codo
somos muchos más que dos.”
Te quiero, porque te siento
rozando siempre mis nubes,
en cada vuelo te subes,
me acaricias como el viento.
Hay como un florecimiento
mutuo, que vive en los dos.
Eres parte de mi Dios,
sólo tu piel me provoca,
no te encuentro en otra boca,
si te quiero es porque sos.
Te quiero en cada alborada,
más allá del gris ocaso;
como parte de un parnaso
pienso en ti, mi enamorada.
Te amo así, porque sobrada
razón me lo aviva todo.
Eres, en un dulce modo
mi más ferviente inquietud,
quimeras y beatitud,
mi amor, mi cómplice y todo.
Te quiero en el redondel
donde la luna desviste
un canto de frío triste,
sobre cada desnivel .
Comparto en tus brazos el
verso, que en la musa acodo.
Te ofrezco… te ofrezco todo…
este amor tan delirante…
te acompaño en lo distante
y en la calle codo a codo.
Te quiero cuando desvisto
tu desnudez en mi mundo...
cuando me olvido un segundo
respirar y ya no existo.
Vivo un amor desprovisto
de distancias y de adiós.
Sigues latiendo entre los
resquicios de mi existencia…
siempre expandes tu presencia…
somos muchos más que dos.