Salpicas de rojo
la plaza
pasea sonriente
la muerte
supuesto enemigo
guerreas
sin tiempo de nada
espadas
te grita en silencio
dolores
que quiebran sus huesos
y siente
espantos que arrastran
su cuerpo
instintos oscuros
de gentes
torero
son ojos que pagan
por verte
incrédulo brillas
muy lejos del cielo.