Rozame el alma con tus manos,con tus besos;
roza mi vida con la tuya;
mirame hasta quedarte en mis pupilas
entera, precisa, cabal y justa;
mi amor por ti no cuenta con medidas
ni manos adheridas a las reglas.
Mi amor por ti transforma mi poesía
en agua pura y torrencial que inunda...
no hay formas de prisiones retorcidas
ni bordes que angosten mis impulsos
de amarte a fuerza de volcán, en paroxismo.
Y así rozas mi ser, casi hendiendome.