En tus labios mis poemas
son gotas de lluvia fresca
que hacen eterna la primavera
donde florece el amor de mi corazón.
Y es que tus besos
son la tinta de mis versos,
escritos en los rincones de tu cuerpo
adheridos a los pliegues de tu alma.
OH dueña de todas las pasiones,
en le viento tus palabras suenan
como deliciosos acordes
que componen la melodía de mis días.
Yo te escribo mirando al cielo
añorando cada una de las estrellas
y mis letras cantan que tu estas
jugando entre alguna de ellas.