Prologuea el libro de mi vida
con la mente en vacío
con inercia sin ida
sin vuelta
Invita al laurel en semilla
que inicie la letra en ceniza
dispersa en memoria
de la sencilla brisa
Corre del tiempo las hojas
crujientes y secas
que declaman rimas
sonrientes y muertas
hojas de vida y letra
que danzan infinitamente
en la esquina de la conciencia,
que consquillean el pasillo
de la vida nueva
Hojas te otoño que invitan a confundirse
con una lluvia de cenizas...