Triste tierra resquebrajada
grietas que sorteo de no caer
a propagar el lamento,
madre tierra que del polvo venimos
y al polvo vendremos entre rescoldos.
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Del antiguo asentamiento
que destrozo tu paraíso
de bellos verdes selváticos
confundidos con el polvo
entre la amalgama de desechos,
bastos recuerdos de lo infertil
que desperdiciamos la madre naturaleza,
al grado de extinguir hasta la conciencia.
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Muriendo tantos verdes por otros tantos
verdes papeles provenientes del frío norte,
entre industrias consumadas
y consumidas por el ego,
ostentosas maderas consumidas
confundidas en lecho donde muchos
o pocos hayan consuelo por encima de este suelo,
que se extingue entre fumarolas
temblores, undimientos y deslaves
solo el cielo testigo inmenso
de cambio extenso en el planeta.
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Prados de hielo deshojando escarcha en placas
por mares y océanos del mundo entero
en inclemencia temperaturas diversas,
marcan el contorno venidero
de los días de ayer solo los de hoy
son los que quedan.
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Madre tierra a que oquedad mi alma queda
si llena de tantos surcos sin labrar en ti se encuentran,
eres fértil pero te estamos manchando
de lunares tu manto donde muere la selva
los bosques cabizbajos de tanta llamarada
que envuelve tu belleza,
convirtiendola en negrura del alma que envenena.
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A donde irán a parar mis retoños y sus hojas
si se han secado y enverdecido las aguas con el fango
del lago aquel que fue azul turquesa
ya ni en los ojos se refleja,
del amorío del gorrión ni su llanto en su canto expresa
la alegría la cubrió el manto gris
de las nubes prefabricadas
al comienzo de la jornada.
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Donde están las amapolas, las siempre vivas ya marchitas
las rosas de colores y claveles de mi madre,
en sueños perdidos ya solo viven en estampas
enciclopedias que nadie visita.
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marejadas de colores
repisa sin las flores
sin el cocha sin el nácar
donde mueren los fulgores,
verde valle donde has quedado
confundido con el talle
del tamarindo reseco de mi calle.
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autor: Adolfo Casas C
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P.D. en el verde que muere por inconsciencia y avaricia de ganar verdes papeles confundidos por el verde de la madre selva.