Desterrados del placer de nuestras pieles
Nuestras almas se han llenado de cariño
Soy un hombre igual que un niño
Y mi guiño
Es mujer.
Este aliño que tendrá la convivencia
Sin tener nuestra presencia
Expectante ha de estar
Porque somos los amantes
Que reclaman sin prudencia el abrazar.
Ese día si llegase
Como un piño de elefantes
Imposible de apartar
Nuestros vientres se unirán y al instante
Sentirás que hace un tiempo
Se afiataron sin estar
Sin tocar
Sin besar
Nuestras bocas delirantes.
No hay apuro ni hay apremio.
Este premio lo obtendremos
A medida que hacemos
Valorar nuestra pasión.
Al momento que se unan nuestros cuerpos
Se unirán agua y desierto sol y mar
Y en las bocas un murmullo de aliento
Se amarán al exhalar.
No hay apuro
Si tu y yo
Somos par y complementos.