Me separo de todo como dijera León Felipe
al referirse “sólo soy un paria”
o un simple peatón como dijera Sabines
pero sigo escribiendo
para todas las mujeres
que han sido luz en el rincón
de mi soledad
incluyendo a las damas de la noche
y al cotidiano vivir
de mis andanzas…,
yo:
el poeta
de cigarro y nostalgia.
Todo lo que escribo es mi vida
es un diálogo al desnudo
me gusta inmersarme
en todos esos pequeños detalles
donde camino a diario…,
el sonar del celular forma parte
primordial de este arduo camino
escucho a mi hijo Jaime Martín
el último de los tres
-que decidió tomar el sendero
desde muy corta edad
por la razón imperiosa
de haber perdido a su Madre-
Sé que es un itinerario arduo
rocoso quizás
y sin futuro
… ¿pero quién soy yo?
Sencillamente un poeta
que gasta la memoria de la PC
en escribir –escribir- escribir.
Además es una cadena irrompible
entre el hombre y el poeta
-el empleado y el poeta-
(el padre y el poeta)
Por eso es la cuestión de:
…¿quién soy yo?
Si he anclado mi vida
entre mis poemas
y, me he olvidado
por qué no sé quien soy
ya que vivo de recuerdos
esas pequeñas gotas
de añoranza
que escurren por mi frente.
Exiliado quizás de mis deberes
del hombre que no soy
del padre que no he sido…,
mi hijo Jorge Adrián ya me lo dijo
-pero mi tronco se torció y no endereza-
Él sabe lo que dice
sincero hasta la punta de sus dedos
(no se sabe callar)
¡es indolente…!
También preocupa ese futuro
en el que vive
… el que estudia aún
Y sostiene su vida en su palabra.
Pero sigue el tecleo –no dejo de escribir-
Les encantan mis poemas
Es extraño porque a veces creo que no es así
¡sin embargo es grandioso saberlo!
Que a mis tres hijos
inclusive a sus amigas y amigos también…,
que en ocasiones se quedan
a escucharme o leer de alguno de mis poemarios
versos
que les llenen o les acojan de alguna manera.
Mi hijo Sergio David el primogénito
con el cuál tuve algunas dificultades
pero ya subsanaron…
Ahora él tendrá que lidiar
y dar vuelta a la noria
(todo se repite y todo lo que daña se voltea)
Ya se casó
me siento satisfecho –sin embargo triste-
pero no hablemos de ello
-además no estuve en la boda
para que incursionar en detalles
a lo hecho pecho-
En fin dentro de lo malo (esta lo bueno)
Su esposa –Ana- es una buena mujer
la considero como una hija
en fin no quiero tocar lo cursi
ni lo trillado
son felices eso es lo importante
-lo demás y el pasado se van a chingar a su madre-
Pero sigo escribiendo
…¿qué soy?
Simplemente un poeta
de cigarro y nostalgia.