BRUJULA
-a mis cuatro hijos-
Estos interrogantes muros
que ya cubren mi cabeza con su talla,
este futuro de mi voz
que se define en cuatro puntos
cardinales
como lindes que concretan
mi densa geografía.
Estas fronteras de amor
que me limitan y convierten
en el eje central
de la morada mas antigua.
Este arrebato de vida
que se cuelga pertinaz y necesario
en mi conciencia
de tierra agradecida.
Este vértigo carnal y palpitante
que me desliza
con un saco de renuncias
por sus canales
de ternuras y osadías.
Por fin,
me han convertido
en el sótano de las cosas caducas,
han seccionado
como dulces tijeras,
las alas de mi voz
y su dogmático sonido
y lo han traducido
con herencias de mi voz
a su sonido.
Conxa Gausí Caballero