No tengo que pedir perdón
sino he hecho nada que me avergüence,
cumplí en mandato del corazón
y tomé lo que a él le pertenece.
A la vida le brindo una flor
para calmar mis pesares,
los angeles con su candor
me acompañan en mis andares.
El mundo con su eterno vaivén
se mece sobre el viento,
sin mirar a quién
le da todo su aliento.
Sobre las flores mariposas
que le da un beso sincero
a tí te brindo una tierna rosa,
al quererte con esmero.
Vuelvo mis pasos al pasado
lleno de tiernos matices,
y en tu lecho consagrado
nos hicimos muy felices.
Te doy besos muy fuertes
con el rocío mañanero,
mensaje de un te quiero
nos damos besos ardientes.
Por: Manuel Palacios