Yo no poseo esta tierra
Ni el grano de maíz que me alimenta
No poseo estas aguas
Ni la dulzura que de ellas emanan
No poseo esa montaña sobre el caribe
Que eriza sobre el horizonte como si la eternidad
Fuera lo mas cercano a estar lejos
Yo no poseo mi alma
Ni lo que ella posee
Yo no poseo esta orquídea
No poseo su fragancia
No poseo lo amargo
No poseo el cacao
No poseo el humo que me explota en la boca
Y me hace delirar
Ni el cocuy que me corre por las venas
Y me enciende
Yo no poseo el io
Ni el retumbar de los cueros
Yo no poseo el incontrolable sentimiento
De temblar cuando las noches son frías
Y el futuro parece un grano de arena rodando sobre una duna
En el medio de un desierto que no poseo
Tampoco poseo el deshojar del araguaney
Ni el despuntar del alba sobre la tierra de Bolívar
Yo no poseo esta bandera
Ni sus colores, ni su estandarte, menos su escudo
Yo solo poseo la sed inagotable de luchar
Solo poseo la obligación inmensurable de arrancar
De raíz la sombra ignominiosa, la mancha de mi sangre
Que lleva doscientos años escondiéndose
Como el agua esconde una brisa que no poseo
Yo solo poseo el saber de no poseer nada
Porque no poseo esta nación
Esta nación me posee a mí
Este inmortal sueño americano
Esta tierra de lunas más cortas que soles
Es libre para poseerme, no para poseerla