Una mirada, un silencio
La sinceridad por la mentira
Un corazón abierto a cambio del secreto
Palabras rotas que se estrellan contra una espalda
helada
Pensamientos del futuro
Y acciones desesperadas
Una amistad condenada
Como una flor en el desierto de la realidad
Confianza destruida
Pensamientos confirmados
De una simple traición
Mentiras que resultan verdad
Algo que mi cerebro
Antes concibió
La paciencia es un don
Que no todos pueden obtener
Las palabras al aire no valen la pena
Escenas de ya verás no me quieres de verdad
La dulce sonrisa de saber que no me equivoque
Lo que le duele al corazón el cerebro sabía que
pasaría
¿Pero desde cuando le sirve la razón al corazón?
Un escrito dando entrada a “eres importante”
Una esperanza al vacío y veintinueve minutos después
Deje de ser para dar paso al olvido
Lo sabía solo quiero que no haya vuelta atrás
Por veintinueve minutos dude
Más encontré la realidad
Veintinueve minutos bastaron para que arruinaras
Una puerta que lentamente se abría…