Tropiezo de sentimientos, en
ciego encuentro, aun no se
dicen nada porque se
encuentran a ciegas cuan
bucardo y su manada sin
referencia de luz ni una idea
bien cifrada.
Pretendes que yo a ciegas
conciba tu semblanza con
letras sordomudas cargadas
de elocuencia y que todos las
entiendan, cuan calle
iluminada, cuando pasen
por ellas.
A ciegas, enredada en
marañas de ciegos trazos,
tú alma quieres que vean y,
muy a ciegas, con el pincel
de la nada esbozaré al ciego
lienzo una imagen con tu
propio parecido.
A ciegas brindo por ti, a
ciegas tus ojos miro y, a
ciegas, mis pensamientos se
incorporan a tu cuerpo
danzando ciegos momentos
al ritmo de mí ceguera.
PABEDIZ…