Dulce querubín del cielo
que entre mis brazos descansa,
naciste para traerme
todo aquello que añoraba.
Bello nombre te corona
con fuerza, con elegancia,
sonríes placidamente
cuando el pecho te amamanta.
Despiertas amor, ternura
en mi alma atormentada,
cual un torrente retornan
a mi corazón, palabras
cada cual es más hermosa
para ensalzar tu mirada.
Retornarán en tropel
cuentos, canciones y nanas
y en mecedora de mimbre
te acunaré ensimismada.
A ti, lindo Ángel chiquito
quisiera darte las gracias
por que despiertas la musa
que dormía sosegada.
Hoy reluce un azul cielo
mis dedos tejen palabras
todas ellas forman versos
para mi niño del alma
que duerme placidamente
entre sabanas de plata.
Ami nieto con todo mi amor