La oscuridad sobre nosotros se posa,
Llueve sobre nosotros dulzura,
Mientras la luna blanca y temblorosa
En el cielo menguante reposa.
Testigo mudo de nuestros besos,
Mientras te tengo entre mis brazos,
Mientras beso muy despacio,
Tus tiernos e inocentes labios.
Mientras te tomo de tu bella mano,
Entre el bosque silencioso y oscuro,
Y en el lago se refleja tu rostro claro,
Mientras yo estoy a tu lado.
Y a nuestros pies las orquídeas se abren
Con su elegante y único resplandor,
Mientras nos mira aquella flor,
En la orilla donde nos encontramos los dos.
Donde me llenas con tu excelsa fragancia,
Mientras nos baña la luz blanca
De las estrellas esplendidas de Francia,
Que desaparecen cuando el amanecer
Lenta y delicadamente nos alcanza.
“Nos llega la esencia y resplandor de la más hermosa flor, eres tu mi más bello y grande amor.”