MIRIAM RINCON U.

Tu ausencia.

En dónde estás ahora

estrella solitaria

que llenaste de luces

mi pálida existencia?

 

En una noche fría

busqué tu fiel refugio,

y he allí que quedé yerta

al comprobar tu ausencia.

 

Volvieron hasta mí

esas noches errantes

plagadas de silencio,

y mis ojos vaciaron

todo un mar de tristeza

por tu amada presencia.

 

Sigo lanzando al cielo

mi agónica mirada,

con la esperanza ciega

de verte aparecer

para llenar de nuevo

este inmenso vacío,

y que mi ser ya deje

por fín, de padecer.