Mi Luna de Agosto
A Chandreyi en sus 17 años
Princesa
se exactamente
el día y la hora
en que te concebimos
todo el amor y la pasión
se unieron
esa madrugada
antes de su partida/
tiene que ser hoy…
y así entre
dos
empezamos a ser
tres
Ya mis pechos
y las náuseas
no mintieron
y sólo por requisito
el examen
El doctor
sin tono de emoción
dijo: está bien
miren el monitor/
mis ojos, mirando
todos los ángulos
no podían definir
casi nada
pero estabas ahí
es niña…
una niña
ahí esta su sexo
decía
las manos, los pies,
es pequeña,
(bueno, no somos gigantes)
pensé,
tiene que ser pequeña
mi pequeña
Hija mía,
te soñé con tu piel del color
del barro negro
que con sus manos
amasan las mujeres
de mi pueblo
con tu pelo y tus ojos
del color de una noche
sin luna
colores de nuestros ancestros
Luego, silencio,
ése es su corazón
latido divino
de vida y amor
Y te imaginé
acurrucada dentro de mi
escuchando,
el sonido del corazón
de tu padre
y el mío
latiendo más
fuerte que el tuyo
Tu papá practicó
el camino hacia el hospital
de día y de noche
no fuera
que al llegar el
momento,
se confundiera
de ruta
y nos llevara
a otro lado…
La fecha prevista
llegó, pero no,
no querías
salir,
paciencia
puede ser hoy,
mañana
o pasado
Desde entonces
supe que serías
valiente y terca
Tu abuelita, tu Tamma,
cruzó el mundo para verte nacer,
estaba desesperada
¿por qué tarda tanto?, ¿todo esta bien?
preguntaba a tu padre
tratando de no preocuparme
Y el domingo por la noche
decidistes empezar
la travesia/
dolor
y mas dolor
no había posición que
lo calmara…
todavía no es hora
dijo el doctor
Lunes, todavía falta mucho…
camina, respira profundo
relájate, ya pasará
En casa
tus dos abuelitas
cada una en su espacio
rezaban a sus
dioses
al final terminaron
en el mismo cuarto
en silencio
con el olor del incienso
haciendo sus plegarias,
una junta a la otra/
y
juntaron a sus
dioses
Martes, no está lista,
esperemos…
ya mi voz no se escuchaba
llegando la noche
te morías….
al quirófano
veinte minutos
y todo listo
un frío que me hacia
tiritar,
mi cuerpo temblaba
pero no me dormí
Escuchaba a los médicos
platicar, contando chistes,
haciendo su trabajo
y vi todo, en el metal
de las lámparas cielíticas
ví cuando te sacaron
y me mostraron tu carita
aplanada,
tus ojitos abiertos
y tu abundante pelo negro
te di un beso
y sentí todavía
las últimas puntadas,
el dolor no terminaba
No había forma
que salieras naturalmente
dijo el doctor,
luchastes por sobrevivir
tres días eternos/
tu cuello rodeado
del cordón umbilical
no permitía que salieras/
y desde entonces
aprendistes a luchar,
inventando estrategias/
avanzabas y retrocedías
así lograstes salvarte
eres una guerrera de la vida
TE AMO