En este preciso instante puedo verte
y además puedo escucharte,
y al mismo tiempo
también me pierdo al soñarte,
deseándote, esperándote,
al oír tu voz y al observarte,
en cuerpo y alma...
tu hermosa presencia,
eres tú... belleza de otro mundo,
¿Serás acaso una fantasía
que mi corazón encontró, amor?
No, no, no,
es posible, pero no,
eres realidad... no hay otra razón...
estás aquí en persona,
junto a mí aún permaneces,
tu imagen, tu cuerpo real y en vida
están a mi alcance,
tan cerca, casi rozándome,
pero aun así, amor,
te extraño con locura
por la simple razón
de sentirte conmigo, tan cerca,
y a la vez increíblemente lejos,
sin poder alcanzarte
voy perdiéndome en mi sueño
hasta que comiences a alejarte.
Ceci Ailín