A orilla de la razón se
encuentran los
pensamientos: un mar de
palabras mudas sin expresar
sentimientos, hasta que salen
de adentro.
En la esquina de la vida, a
orilla de la razón, fui
bañado por las aguas de ese
impredecible mar sin que
pudiera evitar el salpique de
sus olas.
Razones estatizadas: aves
sin alas que ya no pueden
subir…quedándose
rezagadas a merced de una
mención y otras muy
remozadas dejaron en las
orillas su letargo como las
olas del mar.
El horizonte Permanece
abierto a la razón con una
amplitudes inmensas y
colores sin iguales que hacen
de tus perspectivas una
resucitación.
No te quedes en las orillas,
pues, sólo letargos
hay…adéntrate en la
abundancia, revive tus
pensamientos.
PABEDIZ…