Dame razón de romances
Que dispendias por ardor,
De la entidad tan robada
Que se olvida de su amor,
Cuando retoza en el lecho
De mansión de loto y flor.
Pierna de lujo y potingue
Pecho de matrona entera,
Posterior de potra blanca
Envuelta de plata espesa,
Que se reboza en encajes
Aspirando a lo que pueda.
Cubierta con tus caudales
Con vestidos de oropeles,
Las matronas de los oros
No saben lo que es amar,
Al comprar con su dinero
Pasiones de un principal.
Con poderosas maneras
De concluir siendo igual,
Porque el ardor alquilado
Se consume al terminar,
Con emociones de piedra
Es discontinuo entregar.
Hay un lujo de entrevela
En tu porte de princesa,
Sabor de puntilla y seda
Se tornaba un disparate,
Alumbrando con la vela
El besar que tu dejaste.
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
12 de julio del 2011