Temiendo ataque sorpresivo
de lo frondoso de un quenual, de anhiesta peña
hice silencio,me incline en cuclillas
aguce los sentidos y atento a ruido extraño
olor o movimiento de ramas quede quieto
las aves asustadas hicieron silencio junto a mi.
Era esta zona de invierno,un gran pajonal
lugar de chinchines, pingo pingo y magnolias
los arbustos humedos,la niebla dehilachandose
flotantes nieblas llevadas con suavidad por la brisa helada
sospechosa intrigante y sigilosamente el silencio me rodeo.
Segui las huellas, sin soltar el machete,sigiloso,
atento a posible asalto por la espalda,
los ojos tras las hojas de bejucos y madreselvas
podria atacarme,calculando los pasos,
midiendo los movimientos,esperando la hora
el descuido y atacar sin atinar a defensa
no, no seria una oveja tonta que se aquieta ante el peligro
no desespero, ni dare berridos como el chivo,
sere como el puma o leon,como yo mismo y vencere
me se, acosado, olia el peligro,seguido y observado
senti odio, era una bestia y me senti seguro de mis habilidades.
Ascendi sigilosamente a un rocodromo para observar
del torreon cubierto de flores azules,arbustos y retamas
mire la pendiente, la quebrada, el chorro de agua limpia
por fin aviste al puma gris,casi color tierra
valiante,hermoso y terrible para perseguirme
sin duda digno rival de un adan de la creacion
en el centro del borde alto del recodromo, ensordecido
por los ecos de la quebrada de altos peñascos que remendaban
mi grito desafiante "AAquiii..."machete en alto,dando tajos al aire
enfrentado al peligro me desperte de pie sobre la cama.