Ay, senil y veterana tierra de añejos parajes
¿dónde el milagro que te devuelva años, siglos?
Aventurera Mujer salpicadita de contrastes.
Ay, mi pequeña Europa contradictoria y fascinante.
Para ti quiero:
Grandes pechos que amamante
Al solitario ,al adoptado, al desnutrido
Que lloran por la condena sin agravante
De unos justos injustos proveídos.
Libertad ; tasludiza ,verde y elegante
Para no tragar la cicuta de retorcidos,
Para besar sin miedos a los colindantes
Y fuera guerras...
¡bienvenidos, sean, los heridos!
Horas de sol eternas y perseverantes
para cosechar alegría en jardines floridos
donde la sonrisa del amante,
donde el honor, el temple y los latidos.
Entereza ,firmeza, figura y plante
Sosteniendo tantos vocablos esparcidos.
Madura , Coqueta, roja e insinuante
Enamorando más a tus maridos.
España, te quiero feliz y radiante
Laboriosa, cuidadosa con tus paridos.
Te quiero, agradecida y prestante.
Te quiero a pesar de “pocas nueces
Y muchos, muchos ruidos”.
Antonia Ceada Acevedo