Pienso que tus senos
No son tan obscenos
Y cualquier día me los ceno.
Y me apeno
De no tenerlos de momento
Porque haría con ellos un suculento manjar para mi boca.
Soy sediento por tus senos sin dudar.
Mordería tus pezones hasta que te vuelvas loca.
Me podría ir por la tangente
De tus tierras adyacentes del coseno de tu senos
Pero me gustan tu senos
Lindos suaves
Que a cualquiera los provoca.
Y también me podría ir por la pendiente
E hincarle el diente a tu vientre
Pero eso lo haré después
De libar tus senos que me desbocan.
Jugar con ellos a la biroca.
Hasta elevar la roca.
Que aguarda el precioso momento
De adentrarse en el seno de tu grieta barroca
Que a mí con tantas ganas me convoca.
Tus senos
Sueños que me dislocan.